En el planteamiento educativo de las actividades acuáticas, los estilos deportivos son importantes pero no exclusivos, ya que también es necesario que el alumno aprenda actitudes y valores.
Sabemos que en las piscinas hay unas normas de higiene y seguridad, las cuales podemos aprovechar para enseñar nociones de salvamento, fomentar hábitos de higiene individual y colectiva , sensibilizar a los alumnos/as en el respeto y cuidado en el consumo del agua, también en el uso responsable del material, el respeto hacia los demás y el trabajo colectivo.La practica deportiva tiene unos valores intrínsecos como son: el espíritu de superación , el aprender a perder y a ganar, el valor de la disciplina tanto personal como colectiva y la integración dentro del agua.
Teniendo en cuenta las diferencias básicas entre medio acuático y medio terrestre, que mejor manera de enseñar a nadar a los niños/as que a través del juego, que es la herramienta fundamental que ayuda a los niños/as a comprenden el mundo que les rodea, y de esta manera van superando esas sensaciones diferentes que se producen al introducirnos en el mundo acuático, ya que el hecho de entrar en el agua hace que nuestros mecanismos de percepción, orientación, propulsión y respiración se vean modificados.Es importante que el alumno se divierta mientras adquiere soltura en el agua, mejora su motricidad y desarrolla su fuerza física.
Les dejo un vídeo cómico de lo que puede ser nuestro primer día...